Esto sucedía habitualmente

Que absurda nuestra relación
no bebíamos nunca debajo de un árbol
y nos dábamos besos por diversión.

Aprendimos de aquellos: siniestros
que rompieron nuestros lazos
por tan solo algunos pesos.

Es extraño tenerte conmigo
resulta complicado transmitirte mi calor
es paralizante dormir junto a vos.

Por precaución usamos preservativos
y por vos dejamos de hacer el amor.
Que estúpidos fuimos los dos.

A la hora de tomar en familia el té
se encendía la televisión que
irrumpía nuestra pequeña relación.

Y nos paralizaba el cuerpo, el habla
no surgían palabras,
callados, nos acostábamos y así
como si nada nos besábamos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario